El misterio eterno de “El jardín de las delicias”, la obra más fascinante de El Bosco

El misterio eterno de “El jardín de las delicias”, la obra más fascinante de El Bosco

23 octubre, 2025 0 By Redacción

Pintado entre 1490 y 1510, El jardín de las delicias es uno de los trípticos más enigmáticos del arte occidental. Su autor, el holandés Hieronymus Bosch (1450-1516), conocido como El Bosco, volcó en esta pintura monumental una visión compleja del pecado, el placer y el castigo.

Esta obra pintada al óleo, se abre como un libro para sumergir al espectador en una experiencia que podría definirse como onírica.

El panel izquierdo es El jardín del Edén, representa el paraíso terrenal con la presencia de Dios, Adán y Eva.

El central es el El jardín de las delicias y despliega un mundo de exuberancia, donde hombres y mujeres se entregan a los placeres terrenales.

El derecho es El Infierno, y está poblado de criaturas fantásticas y escenas de tormento.

Tríptico cerrado: en su parte exterior, el cuadro alude al tercer día de la creación del mundo. Se representa un globo terráqueo, con la Tierra dentro de una esfera transparente, símbolo, de la fragilidad del universo. Solo hay formas vegetales y minerales, no hay animales ni personas.

Durante siglos, críticos y espectadores debatieron si interpretarla como una advertencia moral o una celebración del deseo. Su imaginario surrealista y simbología desbordante influyeron en movimientos posteriores como el surrealismo, convirtiendo a El Bosco en un artista adelantado a su tiempo.

Más de quinientos años después, El jardín de las delicias sigue siendo un espejo del alma humana: un viaje entre la inocencia, la tentación y la condena.

Hoy la obra se exhibe en el Museo del Prado de Madrid, donde ingresó como depósito del Patrimonio Nacional en 1939.

Tríptico cerrado.